sábado, 1 de septiembre de 2012

El cuerpo humano

Si hay algo que siempre me ha dado mucho de qué pensar ha sido el cuerpo humano. Me alucina la perfección que tiene. Es una perfección constante desde que naces. Nada (o pocas cosas) pueden fallar. Y ya no solo me fascina por la precisión, también me asombra la parte neurológica.
De ambas cosas quería hablar en esta nueva entrada, ambas llevadas al campo deportivo.
Por un lado, excusarme de llevar unos días sin escribir, pero tampoco he hecho mucho. Sigo acumulando kilómetros en bicicleta y nadando mientras que espero ya con ansia la cita del traumatólogo dentro de dos semanas para volver a correr. Volviendo a la parte médica, esta última semana he estado malo. Infección en la garganta (placas) que me han obligado a dejar a un lado el entrenamiento. No suelo ponerme malo, de hecho suelo enfermar 1 o 2 veces al año como mucho, y nunca antes lo había hecho con tal fuerza. Al fin y al cabo ha sido una semana perdida que no tiene mayor importancia, pero una "tontería" así una semana previa a la carrera puede trastocar tus planes. Por no decir algún malestar que surja durante la prueba. 
El entrenamiento del Ironman no solo se compone de la parte muscular, también hay que acostumbrar a tu organismo a ese sobre-esfuerzo que está realizando. Es por esto por lo que durante los entrenamientos hay que seguir unas pautas que sean óptimas para el rendimiento y que podamos llevarlas a cabo el día de la prueba. La alimentación e hidratación el día previo, el día de la prueba y el día posterior a ella, son muy importantes. Como anécdota, en la pasada edición, a mi entrenador los geles le pasaron una mala pasada y sufrió para terminarla porque tuvo problemas estomacales.
En cuanto a la parte de la cabeza, es para aclarar una misma pregunta que me hace mucha gente: ¿Qué parte de preparación física respecto a la mental se necesita? En mi humilde opinión, y cada día que pasa estoy mas convencido de ello, el deporte (concretamente largas distancias) está compuesto de 55% físico, 40% cabeza y un 5% que, aunque no soy supersticioso, se lo dejo a la suerte. De lo estoy más convencido aun, es que cualquier persona que tenga un ámbito de vida saludable es capaz de hacer lo que se proponga. Muchos son los que me admiran o lo que, por el contrario, me tachan de loco. Bien, pues todos vosotros seriáis capaces de hacerlo. Es tan solo tener la ilusión y saber convivir con una disciplina deportiva diaria, a la que acabas acostumbrándote y, en mi caso, enganchándote. 
Lo dicho, ¡kilómetros y salud a todos!

1 comentario:

  1. Me gusta que te fascine tanto el cuerpo humano.A mi me ocurre lo mismo desde hace mucho tiempo y he sabido tomar mi camino. La perfección del cuerpo y la complejidad de la mente, somos un todo.
    Mucho animo en tu camino!

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